El Rey Juan Carlos ha logrado una proeza deportiva en Cowes (Isla de Wight) en el Campeonato del Mundo de Vela de 6 metros. La isla está muy ligada a la familia británica del rey. Su abuela, bisabuela, la Reina Victoria Eugenia y su tatarabuela, la Princesa Beatrice crecieron en esta isla pues Osborne House era la residencia favorita de la Reina Victoria.
EL Rey ha estado muchas veces en Wight. Su padre, el Conde de Barcelona, le hizo cicerone en los años cincuenta y sesenta. El Rey emérito, que conoce bien esta isla frente a la ciudad de Southampton, llego el pasado 31 de agosto, con la intención de participar el en el Campeonato del Mundo de Vela de la clase 6 metros, categoría en la que se ha especializado en los últimos años. El Rey a sus 85 anos se ha sometido a un duro entrenamiento para ponerse en forma con la intención de revalidar el doble campeonato del mundo que logró en Vancouver (Canadá), en 2017, y en Hanko (Finlandia), en 2019.
Y lo ha logrado, pues el Bribon del Real Club Nautico de Sanxenxo gana con este título su tercera victoria en el Campeonato del Mundo de la clase 6 Metros, al imponerse en la división de Clásicos del Campeonato del Mundo 2023.
El Rey llegó a Cowes diciendo: «si he venido hasta aquí es para ganar y asi fue. La competición en la División de Clásicos fue más reñida y el resultado se decidió en el último momento. Al final, iba a ser una batalla real entre el actual campeón Dix Août (1950 Bjarn Aas), propiedad de Louis Heckly, conocido cariñosamente en la flota como el «Maharajá de Djeezupuhr», y el Bribon (1947 Arvid Laurin) de Su Majestad el Rey Juan Carlos. En nombre del Maharajá, el timonel Gery Trentesaux y su tripulación lo dieron todo, pero el Bribon del Rey estaba que ardía, consiguiendo el primer puesto en las regatas sexta y séptima y asegurándose el campeonato con un cuarto en la octava. Es la primera vez que Trentesaux participa en los Seis Metros, y estaba claro que, aunque decepcionado por no ganar, estaba encantado de haber disfrutado de una competición tan estupenda contra una tripulación tan fuerte.
Su Majestad se mostró encantado con el resultado de Bribon y reconoció el excepcional logro de su equipo, con Pedro Campos como jefe de equipo y dos timoneles de máximo nivel como el campeón olímpico cántabro Alejandro Abascal y doble medallista olímpico canadiense Ross MacDonald, junto al proa vigués Alberto Viejo y el trimmer coruñés Roi Alvárez, al que se ha incorporado al navegante transoceánico hispano-británico Simon Fisher como estratega y conocedor de las aguas de Cowes.
«Es un equipo sensacional, un equipo realmente bueno. Hemos trabajado para ello, hemos luchado, y aquí está el resultado», dijo Su Majestad tras la importante victoria.
Ahora sería justo y necesario que el Rey Juan Carlos recibiera el reconocimiento que se merece de las autoridades deportivas españolas y del gobierno pues ha logrado un importantísimo éxito para el deporte español y España debe celebrarlo con orgullo.
Enhorabuena a Vuestra Majestad y a toda la tripulación del Bribón.
Por Carlos Mundy
