ENÓLOGO elaborador de experiencias únicas Por JAVIER PIERA
Cuando el sector del vino en España lucha en una guerra de precios y calidad, hay héroes que van contracorriente sacando el mayor valor a cada acción. El valor es el vino y la acción el terruño. Quien entiende esto y aprende el oficio, se convierte en el enólogo de cabecera de quienes quieren hacer los mejores vinos.
Ignacio de Miguel es el menor de ocho hermanos, hijos de un médico amante del campo, de la naturaleza y de la caza, cuyas pasiones supo transmitir. ¿Alguna vez han regalado vino al médico después de una intervención en la que todo haya salido muy bien? El padre de Ignacio era muy buen médico y tenía una gran bodega que sirvió de inspiración a la actual profesión de este innovador del vino en España.
Pero primero vino el campo, el amor por los caballos y la caza. Una afición que aún mantiene y que domina. Aunque, como él mismo reconoce, disfruta casi más en un lance que en una cata, quizá porque lo segundo es mucho más frecuente y por mucho que él se empeñe en que no sea así.
Luego sí, el estudio, la ciencia. Cuando hablamos de la figura de un enólogo nos podemos imaginar una mezcla entre hombre de campo y científico que busca el mejor ingrediente para elaborar con éxito su formulación. Estudió Químicas primero y remató con enología y una estancia en Burdeos. A esas cualidades se le suma su humanidad: no sólo es un gran profesional del vino, sino un amante de la gastronomía, de la buena mesa, y de las sobremesas, en las que sus charlas están llenas de geniales anécdotas que ha ido
coleccionando, como botellas, en su trayectoria. Sentarse a la mesa de los mayores desde pequeño, y compartir mesa después con grandes empresarios, le hace ser el invitado perfecto. Momentos en los que comparte sus principios en el sector y todo lo que ha aprendido de sus maestros, siempre mostrando muy buen humor. Así, también con humildad, reconoce que no haría vino en Rioja, donde ya se hacen grandes vinos y él tendría poco que aportar.
Pero la realidad es que aporta mucho: cuando un enólogo titular de una bodega está atiborrado de información de la viña, depósitos y barricas, una segunda opinión siempre se agradece; esto lo mantiene de su herencia de familia de médicos. Así puede ayudar y aportar valor a los magníficos vinos de los que es, en parte, responsable. Reconoce que la función del enólogo es fundamental para la bodega, sobre todo en términos de la producción que hay que elaborar, pero la sintonía fina, la mezcla, la decisión de cuáles y cómo, se hace en equipo y son las claves del éxito.
Esto lo aprendió con sus primeros proyectos, nada menos que con Carlos Falcó y Antonio del Valle, el enólogo en la finca de Malpica. Pero allí, coincidió con los grandes nombres del vino del momento: Emile Peynaud y Michel Rolland, dos de los más grandes. Con ellos puso en práctica la profesión que ha ido desarrollando hasta hoy, el consultor externo para elaboración de vinos, de grandes vinos. Empezó con 24 con estos bon vivants, y desde entonces su currículum es espectacular.
Con casi 20 bodegas en diferentes regiones de distintas denominaciones de origen, podría
Hairstyles are markers and signifiers of social class, age, marital status, racial identification, political beliefs, and attitudes about gender. In many cultures, often for religious reasons, women’s hair is covered while in public, and in some, such as Haredi Judaism or European Orthodox communities, women’s hair is shaved or cut very short, and covered with wigs. Only since the end of World War I have women begun to wear their hair short and in fairly natural styles. In both the 1960s and 1970s many men and women wore their hair very long and straight.In the 1980
ENÓLOGO elaborador de experiencias únicas
decirse que está dejando hijos en todo el terruño español. Aunque no lo reconoce, el estudio del clima, del suelo y de la variedad de cada zona le ha ayudado a sacar el mejor partido de cada proyecto. Es imposible hacer dos vinos iguales en zonas diferentes. Y al contrario: Su predilección son los Montes de Toledo, donde ha colaborado con varias bodegas haciendo diferentes estilos de vino, demuestra que un mismo terruño da todos los argumentos para vinos de películas de toda índole. Eso sí, todos entretenidos, gustosos, ricos, amables, y con puntuaciones por encima de 90 en las guías más reconocidas. Pensados para el público. TIERRAS DE ORGAZ, CARRASCAS, Un oasis en La Mancha, con los magníficos vinos de Carrascas; Vino de Pago en Larrainzar, Navarra; un excelente vino de Rueda, Nieva, con Martúe; los nuevos vinos de altura en el Sur de España, excelentes y mitológicos con Tesalia en Cádiz; una de las bodegas impulsoras de la calidad en Ribera del Guadiana, Bodegas Carabal; y su último proyecto en su área de dominio en Montes de Toledo, con Tierras de Orgaz, son algunos de sus ejemplos.
Para el sector su labor es fundamental porque ayuda a salir de los clásicos gustos y regiones. Otros terruños que aportan vinos excelentes al sector. Muchos empresarios traen grandes proyectos al sector, y los que cuentan con profesionales desde el principio, además, triunfan, y son los que suelen contar con enólogos externos como Ignacio de Miguel.
Él les ha ayudado a ganar con sus vinos pero él también ha ganado: sus magistrales conferencias son objeto de estudio en los cursos de sumilleres y aficionados al mundo del vino. Las Mil Manchas es un ejemplo del paradigma del vino en España. Una región marcada por el estereotipo de vino de baja calidad que resulta ser todo lo contrario. O el Arte del Vino en el Museo del Prado, otro ejemplo de su aportación al sector.
De Miguel presume de hacer nuevos vinos clásicos. Vinos que están para quedarse y que no hace falta que sigan corrientes de moda. Sus vinos se explican solos, no son complicados, sino todo lo contrario, por eso sus clientes son los grandes empresarios del mundo de la industria y finanzas que, algunos como capricho y otros cumpliendo un sueño, han decidido invertir en el mundo del vino. Vinos para celebraciones especiales, pero también para que se consuman todos los días.
Unos elaboran vinos… Ignacio de Miguel crea momentos inolvidables.